Cuando empiezas a caminar lo primero que te planteas es cuánto vas a tardar en llegar al destino de ese día, no has empezado y ya quieres llegar. No entiendo por qué los seres humanos somos así, siempre pensando en el futuro en vez de vivir el presente.......por lo que mi consejo, el que me intento aplicar a diario es....
Disfruta del momento, respira, siente y vive HOY!
Empezamos a caminar y nos vamos dando cuenta de la cantidad de gente que hay caminando con nosotros, personajes de todo tipo: familias, parejas, grupos de amigos, deportistas, ciclistas, incluso alguna que otra persona va caminando sola. Todos con sus historias y razones por las cuales decidieron vivir esta maravillosa aventura, porque si algo tengo claro, es que sea el motivo que sea, si el camino te llama, tienes que ir a hacerlo.
Sabes esto que te dicen que nada como el olor a naturaleza, a arboles y a eucalipto, a ríos y tierra húmeda.....pues sí, pero no. Estamos rodeados de la mas pura e integra naturaleza, lo que quiere decir que a cada paso que das vas viendo y oliendo caca de animales por todos lados, si, el olor a caca de vaca y de cerdo formará parte de tu camino y tu formaras parte del camino por siempre. Al principio tratas de no pisar la caca, a las 3 horas te da igual todo y hasta la pisas con más fuerza.
El primer día no hicimos nuevos amigos, si, vas hablando con alguna que otra persona, pero me gustaría decir que es como una toma de contacto, no te atreves a hablar mucho con la gente. El primer día es como cuando eres un niño pequeño y lo observas y lo tocas todo antes de decir tus primeras palabras, antes de estar preparado, pero cuando empiezas ya no puedes parar, porque esos desconocidos que van caminando a tu lado, no sé cómo ni de que forma, pero a partir de ahora serán parte de ti eternamente, siempre serán tu familia del camino.