Una vez leí esta gran frase escrita por Paulo
Coelho “LAS PALABRAS SON LÁGRIMAS ESCRITAS” y yo necesito darle voz a mis
lágrimas y ya que tengo este medio que
yo misma creé y que soy LIBRE para expresar mis sentimientos, voy a hacerlo.
Yo soy VENEZOLANA, lo digo en grande y con
mucho ORGULLO, yo nací en un país donde daba igual el color de tu piel, daba
igual que fueras rico o fueras pobre, ahí todos éramos hermanos, en un país que
acogió a miles y miles de emigrantes incluido mi padre y a todo su familia,
dónde tuve amigos árabes, italianos, chinos, alemanes, españoles, portugueses,
colombianos, argentinos y un largo etc. Nací y crecí en un lugar donde le
llamaba PANA a todo el mundo, daba igual
que no le conocieras, te acercabas y le
decías: PANA ¿sabes dónde queda la biblioteca central? y el PANA te contestaba…….claaaaro
mi Pana si esta aquí mismito cruzando la siguiente cuadra. Todos éramos
diferentes pero teníamos una cosa en común, todos AMÁBAMOS a nuestro país, el
hecho de haber nacido en él o no realmente no importaba, porque si trabajas por
Venezuela y luchabas por ella, tú también eras Venezolan@.
Hace casi 10 años que vivo fuera de Venezuela
y no me arrepiento de la decisión que tomé, no me arrepiento porque aunque al
principio fue muy dificil al final me adapté y aprendí a vivir lejos de ELLA, pero
una cosa tengo clara, cada día de mi vida me duele más y más Venezuela, me
duele ver tanto ODIO, tanta injusticia, me duele ver que no se haga nada para
resolver esta situación y ya no puedo más, no puedo seguir reprimiendo mis
sentimientos, esta última semana me acuesto y me levanto con un solo pensamiento….Dios
ayuda a Venezuela. Me despierto desesperada buscando información de lo que está
sucediendo, hablando con mis amigos y mi familia, rezando todos los días que estén
bien y que no les ocurra nada.
Estoy cansada de la demagogia barata que usan
las personas que están presidiendo actualmente el gobierno diciendo que desde
que ellos están en el poder hay más gente escolarizada y nadie pasa hambre. NO,
no me sirven de nada estos datos si salgo a la calle con miedo a que me pase
algo, no me sirven estos datos si voy al supermercado y no consigo los insumos
básicos, no me sirven estos datos si no puedo expresar mi palabra sin que se me
tache de fascista, no me sirven estos datos si no puedo ser LIBRE y vivir en
PAZ en mi propio HOGAR, en mi propio PAÍS. Por eso no salimos a la calle con
armas, nuestra mayor arma es LA PALABRA es LA VOZ, nos lo han quitado todo,
pero nunca nos quitaran nuestro AMOR por Venezuela y por ese AMOR yo te dedico
estas palabras.
Venezuela, mi tierra hermosa, no puedo ni
empezar a calificarte porque me quedaría sin adjetivos suficientes, fuiste mi
sombra y mi cobijo durante 20 años y te estaré eternamente agradecida, me
amaste sin pedir nada a cambio y yo, yo te amaré hasta el final de los días. Mi
Venezuela querida, ahora te desangras por los cuatro costados, ahora tus
lágrimas no paran de brotar y tu voz cada día parece más ahogada en un mar de incertidumbres.
Quisiera prometerte que pronto todo cambiará, quisiera que creyeras en nosotros,
tus hijos, que sepas que pronto dejarás de ver tanto ODIO en los rostros y que
ya no volverás a ver a un hijo tuyo empuñando un arma contra otro. Madre
querida quisiera prometerte tantas cosas, pero no soy capaz de hacerlo, no
quiero mentirte más, no quiero esconderme detrás de palabras que quizás nunca
pueda cumplir, pero lo que sí puedo prometerte, es que nunca bajaré los brazos,
nunca dejaré de luchar por ti, nunca me quedaré callada ante la injusticia y
nunca nunca nunca te dejaré sola, porque tú vas allá a dónde vaya cada hijo
tuyo, estás en nuestros corazones y en nuestros recuerdos y eso NADIE nos lo podrá
arrebatar jamás. TE AMO VENEZUELA
